Biblioteca Pública, Madrid
Concurso Biblioteca Pública en Arturo Soria, Madrid 2006 El concepto de Biblioteca como lugar de estudio está asociado a muchas de las carencias de este país. En estos últimos años, una vez arraigados en la economía de prosperidad y optimismo, la sociedad española está reconfigurando el espacio donde vive, se relaciona y se expresa de una manera radicalmente diferente a como lo hacía antes y en consonancia con sus socios europeos. La Biblioteca se presenta ahora al ciudadano como un Centro de Información y de Préstamo porque la institución que la dirige lo ha querido así y porque el usuario final está preparado para ello. El uso del espacio de la Biblioteca y las posibilidades que esta ofrece es una feliz conjunción entre la interpretación del espacio público como modelo de Acción Social y la concentración de actividades propia del Espacio de Consumo. Para ello, debe apropiarse del lenguaje comercial y de las estrategias de marketing que las grandes superficies de distribución y los centros comerciales despliegan ante sus consumidores. Debe asimilar el concepto de que la publicidad y el marketing son el arte de lo cotidiano y de lo real, y convertir el recorrido a través de sus distintas actividades en una experiencia donde se combinen sugestión y deseo como motores del paseo, concentrándose en la vista como principal sentido desencadenante de la seducción. El proyecto recurre a una estructura en torno a “un mall” típico de la arquitectura de centros comerciales, como paseo acondicionado con suficiente luz natural que pone el marco y genera la secuencia de acontecimientos que se van desarrollando. El espacio es siempre fluido y permite y fomenta los recorridos transversales iniciados por el interés y la curiosidad despertada en el individuo debidos a la densidad de situaciones y de objetos. El mobiliario y su disposición es fundamental en este tipo de arquitecturas, porque es la manera en como se expone que determina el tono en que el usuario se va a acercar al objeto. Frente a la forma expositiva tipo “almacenamiento” proponemos otro discurso. Que utilice la evidencia de la imagen, lo obvio del eslogan, tratando los artículos nuevos como Novedades, los antiguos como Clásicos, las nuevas tecnologías en ambientes adecuados, la siñalética como reclamo no sólo como mecanismo de orientación. Propuesta De carácter programático Las prácticas lúdicas organizan la vida colectiva Hemos querido hacer una valoración de la capacidad de crecimiento que tiene el espacio propuesto para un periodo de 30 años comparando la superficie ocupada por el mobiliario según los siguientes supuestos: Los datos estadísticos correspondientes a la media de las Bibliotecas de Distrito, revelan que el crecimiento anual de los fondos es de 4.000 volúmenes por Biblioteca, incluyendo altas y bajas. Ese ritmo es probable que se mantenga estable los próximos años. En principio no existen indicios que indiquen que se pueda modificar la cantidad de lectores, por lo tanto consideramos que los puesto de lectura van a seguir siendo los mismos. En cambio podemos aventurar un crecimiento anual de los puestos de ordenador en torno a un cinco por ciento hasta una fecha clave estipulada en el 2010. A partir de esa fecha se puede diagnosticar un estancamiento en la adquisición de más puestos de ordenador debido a factores sociológicos asociados a una problemática relacionada con la facilidad y generalización del uso del ordenador en el ámbito doméstico. Eso unido a una oferta de vivienda de reducidas dimensiones. Generalizará un grave problema con la función de almacenamiento en la vivienda. El libro además de ser un objeto raro, también será un objeto caro para almacenar debido a la cantidad de espacio que ocupa. Por eso pensamos que la Biblioteca como destinataria pública del almacenamiento de libros y gestora de su préstamo lo continuará siendo en un futuro. Y si cabe mas aún de lo que lo es ahora. Toda especialidad está íntimamente relacionada con las actividades que allí se desarrollan. Mientras que la expresión del tiempo productivo puede ser una óptima orientación en el espacio que refleja la eficiencia temporal y económica, la expresión espacial del tiempo lúdico privilegia la desorientación que fomenta la aventura, el juego y el cambio creativo.